SEO técnico o de comportamiento. ¿Qué posiciona mejor?

Venid, niños. Acercaos que el abuelo os va a contar una historia.

Hubo un tiempo en el que los buscadores de Internet no buscaban. Si, si. Así como lo oís. Eran catálogos de URL´s simplemente. De hecho, el primero de ellos Aliweb aún funciona.

Cada uno metía su URL en la categoría que mejor le parecía y la gente navegaba por ellas para encontrar la que creía que mejor cuadraba con lo que estaba buscando.

El resto de la historia es conocida. En un abrir y cerrar de ojos, pasamos por Altavista, Yahoo y por fin, en 1998 se presenta Google.

¿Qué diferencia a Google de sus predecesores?

Paulatinamente, con la presentación de sus constantes actualizaciones de algoritmo, empieza a incluir como factor de posicionamiento natural, los condicionantes de comportamientos colectivos e individuales (sobre todo estos últimos) de los usuarios del buscador.

Mientras que los anteriores buscadores se centraban casi exclusivamente en factores técnicos, Google le empieza a dar mucha importancia a lo que sabe sobre el uso del buscador y su navegador (Chrome) por parte de la gente.

Todo esto, hasta hace algunos años hacía agua por una razón sencilla: el ordenador era “de la casa” por lo que el análisis de los comportamientos a través de las cookies, incluía a las páginas de la madre, el padre y los niños y el perro de la casa también.

Con el abaratamiento de los ordenadores y la invasión de los portátiles, esto cambió de forma drástica. Ahora los perfiles eran mucho más personales.

Pero hubo todavía un cambio de comportamientos mucho más radical: el móvil. El año pasado ya se superó el tráfico móvil con respecto a los ordenadores de escritorio.

mobile-vs-desktop

Y este año, se realizaron más búsquedas a través de estos dispositivos que a través de ordenadores. Lo que ha provocado el 21 de abril de este año, lo que se conoció como el Responsive Gate de Google.

Mobile-vs-Desktop-Search-Volume

¿Y todo esto dónde deja al SEO?

Pues, yo creo que sabiendo y estudiando estos cambios y gestionando páginas en el día a día, lo deja en mejor lugar que nunca. A pesar de lo que digan los sepultureros de siempre.

¿Por qué digo esto?

Porque por suerte, además de ser algo natural, deja poco (o menos que antes) espacio para que un listillo se aproveche de alguna sobre optimización para sacar alguna ventaja a corto plazo.

¿Y dónde se refleja todo esto?

El primer lugar donde se fue reflejando todo esto, fue en Google Analytics hace algunos años. El porcentaje de “Not provided” iba subiendo como la espuma y mientras algunos se tiraban de los pelos, otros intentábamos ya en ese momento ir viendo de qué manera reemplazar este importante dato de análisis sobre la procedencia de nuestros visitantes.

Para el que no lo sepa, la crisis del Not provided comenzó en 2011 cuando Google estandariza el protocolo SSL a sus búsquedas para aquellos usuarios registrados en alguno de sus servicios.

¿Y qué tiene qué ver esto con el SEO?

Mucho. Porque como vimos anteriormente, los factores de comportamiento tienen cada vez más importancia ya no sólo en el momento de la búsqueda, sino también en la fase de navegación de una página web. Apartados como el tiempo de permanencia, la usabilidad, la tasa de rebote, etc., ya eran importantes pero cada vez lo serán más.

Cuando uno hace un estudio de SEO para saber qué posición ocupa un sitio por una palabra clave determinada, lo hace sobre un “navegador limpio”. Sin cookies, en ventana de incógnito, sin extensiones activadas, etc. Lo que tendríamos que preguntarnos es si esto es la realidad o sólo un Matrix que nos queremos creer los que trabajamos en SEO.

El cliente (y casi el 100% de usuarios) en su día a día, ni borran cookies – algunos de ellos no saben ni siquiera lo que son -, ni navegan en pestañas de incógnito ni se desloguean de sus servicios habituales para buscar en Google. Por lo tanto, los resultados que obtienen están condicionados; muy condicionados por sus comportamientos individuales y sociales.

¿Y qué pasará en el futuro entonces?

Pues yo que se. Si lo supiera no me gastaría más que un billete de Lotería 🙂
Lo que si puedo sospechar es que Google seguirá usando todo lo que sabe sobre nosotros y nuestra forma de buscar y navegar para tratar de acomodar los resultados a lo que más se acerque a nuestros “resultados exactos”.

A decir verdad, está hace mucho tiempo cerca de ello. Menos del 9% de los usuarios pasan a la segunda página de resultados cuando hacen una búsqueda. Las bases del SEO técnico yo no creo que se vean perjudicadas. Siempre posicionará mejor una página con buen código que una con código basura. Optimizar URL, títulos y descripciones, mientras aparezcan en el snippet siempre tendrá valor. Pero ahora bien, que cada vez tendrá más en cuenta la calidad del contenido y el comportamiento con respecto a ese contenido; lo tengo más que claro.

¿Lo tendrán las empresas?…